Por Carolina Miranda
Quiahuiztlán es un asentamiento Totonaca, muy cerca de la playa a la que llegó Hernán Cortés hace 500 años. Se trata de una zona arqueológica donde se encontraron restos humanos de sus antiguos pobladores.
El nombre del sitio es de origen náhuatl y significa: “El lugar de la lluvia”. Y cuenta con una vista espectacular hacia la playa de Villa Rica, que se encuentra justo frente a este asentamiento que se integra por una pequeña plaza central, un juego de pelota, un adoratorio y un cementerio.
Ubicado a 75 minutos de Xalapa, la capital del estado, en una desviación que se toma sobre la carretera Costera Cardel-Nautla, Quiahuiztlán resguarda la historia del pueblo Totonaca del periodo Epiclásico, grupo que perdió fuerza como efecto del debilitamiento de Teotihuacán.
De acuerdo a investigaciones del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) este asentamiento de la planicie costera de Veracruz “sufrió dos invasiones en el Posclásico, primero la de los Toltecas y posteriormente de los Mexicas, de quienes permanecen sujetos hasta el momento del contacto español”.
A consecuencia de esto los habitantes de los antiguos asentamientos se reúnen en pueblos pequeños con extensiones moderadas de territorio, señalan.
Quiahuiztlán se localiza aproximadamente a cinco kilómetros de la playa y su poblado, punto en el que Hernán Cortés fundó la Villa Rica de la Veracruz, lugar en el que se concertó una alianza entre los pueblos Totonacas y los españoles para conquistar el imperio Tenochca.
¿Cómo llegar?
Se toma la Carretera Costera Cardel-Nautla (Federal No. 180); en ella se encuentra la desviación Farallón-Tinajitas, que conduce al poblado de Los Metates. Al este de dicho poblado se encuentra la zona. El visitante puede arribar al sitio por medio del transporte público.
Horario
Lunes a Domingo de 08:30 a 17:00 horas.
Cobro de acceso: 45 pesos
