“San Pascualito Bailón, báilame en este fogón. Tú me pones la sazón y yo te bailo un danzón”.
Por Carolina Miranda
Xalapa, Ver.-Pambazo de chorizo, quesillo y mole, dorado de papa, tostada y picadita de frijol rindieron culto a San Pascual Bailón, religioso franciscano, que entre otras cosas cocinaba y repartía comida a los pobres.
Una típica merienda xalapeña que se ofreció en la cocina del Taller Acuyo en honor a todas las cocineras y cocineros de la región. La anfitriona fue la chef y antropóloga Raquel Torres Cerdán.
“Hace 20 años siendo… inventé una muestra gastronómica en el Centro Recreativo con un objetivo: Dar a conocer que las y los que cocinamos tenemos un protector”, explicó.
San Pascual, añadió la representante de la cocina autóctona, es “alguien que, en el imaginario católico es nuestro intermediario para la Cocina.Para que nos dé sazón. Para que lo que cocinamos no haga daño a quién coma. Para que alcance. Para que haya armonía al cocinar y al comer”.
En el exterior del lugar, junto al horno de leña se erigía el altar con su imagen en madera, cazuelas, utensilios de cocina, verduras y diferentes tipos de maíz.
“Gracias San Pascualito que en Xalapa y en la región nos has brindado sazón e ingredientes por montón”.
San Pascual Bailón es considerado santo patrón de los cocineros, pues se dice que su fervor salvaba los platillos que cocinaba, con la intervención de los Ángeles. De acuerdo a la creencia, hay que encomendarse a él con versos y frases como: “San Pascualito Bailón, báilame en este fogón. Tú me pones la sazón y yo te bailo un danzón”, si quieres que tu platillo tenga un excelente sabor.