La gloria de Veracruz

Por Carolina Miranda

La gloria de Veracruz deja un sabor dulce,  refrescante al paladar, una sensación de satisfacción en el estomago y algo de alegría jarocha.

El sabor del plátano roatán con un toque de vainilla, hielo raspado, saborizante de grosella, lechera, leche condensada y la canela, se combinan para hacer una dulce gloria típica de Veracruz.

Quienes disfrutan de este tradicional raspado veracruzano realmente se sienten en “la gloria” cuando lo prueban. Normalmente lo hacen agazapados del sol, en algún rincón con sombra.

Doña Antonia asegura que prepara las glorias desde hace 35 años, con la misma receta con la que se elabora actualmente en decenas de puestos a lo largo de la zona turística. Para darle un toque diferente a la suya, le agrega una galleta de chocolate.

“ya tengo rato aquí trabajando, unos 35 años ya…las glorias son jarochas, cuando yo empecé no se le ponía galleta, todo preparado con puro hielo, pero nosotros para llamar la atención le pusimos la galleta”.

En sus primeros años de venta de raspados, recuerda, se ponía con su puesto en el mero malecón de Veracruz, “cuando estaba el camellón todo abierto”, ahora se ubica en el corredor turístico, junto al muelle.

Foto: Identidad Veracruz

Ha sido su forma de vida, aunque no siempre tiene tardes resplandecientes. “Ya nos acostumbramos que a veces se vende mucho y a veces no”, comentó Antonia Pérez Mendoza, una mujer de piel morena, un poco más curtida por el sol, de voz y mirada amable.

Es una tradición de muchos años, que se ha seguido de generación en generación como la familia de Don Arturo Ayala. Aún recuerda cuando su padre la llevaba a comerse una gloria, ahora va acompañado de sus hijos y de su esposa.

“Cuando viene la familia de fuera los traemos a comer un raspado…A mi me gusta mucho, sabe un poco dulce pero me gusta, lleva lechera, canela”, mencionó.

Toda la vida ha comido glorias, desde niño cuando su papá lo llevaba a comprar estos raspados. Recuerda que antes acudía a un establecimiento que se encontraba en la calle Xalapa y Cuauhtémoc, ahora acude a uno de los sitios más socorridos en la Carranza, casi esquina Flores Magón.

Foto: Identidad Veracruz

La tradicional gloria, tiene algunas variantes a propuesta o petición de los propios comensales, quienes piden el saborizante de grosella por piña, durazno o algún otro.

Además, se han elaborado otras versiones conocidas como “la Monjita” un raspado con saborizante de rompope, lechera, leche evaporada, vainilla y canela; así como la “chamoyada” que lleva limón, chile en polvo, líquido y chamoy y el “diablito”

“Lo que más pide la gente es la gloria, la chamoyada y el diablito, poco piden el respaldo en Veracruz”, aseguró  Benito Ferman, mientras atiende el negocio de su hija en el mercado de artesanías.

Foto: Identidad Veracruz
Foto: Identidad Veracruz
Foto: Identidad Veracruz
Foto: Identidad Veracruz
Foto: Identidad Veracruz
Foto: Identidad Veracruz
Foto: Identidad Veracruz
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