“Danger” el amoroso
*Sufrió maltrato, pero ahora Danger es un perro sumamente amoroso, con pelaje brilloso, cuerpo fornido y libre de maltrato en el centro Tikchihua Omeh,
Arantxa Arcos
Teocelo, Ver.- De estar casi en los huesos, “Danger” pasó a ser un sonriente perro pastor belga malinois. Su cuerpo lucía frágil, como una hoja separada de la libreta. Las costillas se marcaban simulando las ondas que se forman de un güiro.
Sus codos tenían costras, raspones y lesiones por carecer de grasa corporal para rozar con el pavimento cuando descansara después de caminar horas en busca de comida o agua. La columna vertebral resaltaba del lomo fusionando con las costillas visibles.
Una cuerda atada a su cuello era más gruesa que su espalda. Las orejas dejaban pasar la luz hacia su chipo negro que olfateó más de una vivienda en Teocelo.
l transcurrir por largos periodos le generó deshidratación extrema al grado que cuando fue rescatado, el veterinario determinó que su cuerpo estaba extrayendo el agua de su cerebro, llevándola a una muerte lenta y dolorosa.
La desnutrición que presentaba era muy avanzada y destruyó por completo su flora intestinal. Su condición física era deplorable e incomodó a una multitud en la comunidad de Llano Grande, donde lo rodearon con machete en mano para darle fin a su vida.
Danger no era capaz de levantarse por sí solo, no tenía pelo y además estaba lleno de pulgas, entre otros parásitos que comenzaron a reproducirse en los pocos nutrientes que le quedaban.
Su salvación fue una camioneta que iba pasando por el lugar donde iba a morir sin poder defenderse. Los tripulantes del vehículo lo subieron para ofrecerle comida, agua y un baño. Esto se complicó por la fragilidad que tenía, no podía sostenerse de pie.
La primera noche de su rescate vomitaba todo lo que ingería, presentó diarrea con sangre y expulsando parásitos que habitaban su cuerpo. Al amanecer, fue atendido por un veterinario en la comunidad de Monte Blanco.
El tercer y cuarto día del rescate permaneció recibiendo suero e ingiriendo latas de atún especial. Vitaminas y medicamentos se anexaron a su dieta para sanar su intestino y que este mantuviera la comida que consumía.
Cuando comenzó a tener fuerzas y se puso de pie, Danger realizaba pequeñas caminatas luciendo pelo nuevo, la alegría se distribuyó en su cuerpo de cuatro patas activando la cola y orejas.
Los vómitos cesaron y pasó de degustar atún a croquetas revueltas con arroz.
Actualmente, Danger es un perro sumamente amoroso, con pelaje brilloso, cuerpo fornido y libre de maltrato en el centro Tikchihua Omeh, en el municipio de Teocelo, donde vive con otros cinco perros esterilizados.
