*En un frondoso jardín con más de 200 variedades, Doña Santa Hernández cura empacho, algodonsillo y hasta piquetes de víbora
Nadia Carrión
Cosoleacaque, Ver.- Con una técnica milenaria y las bondades de la madre tierra, una mujer morenita logra sanar a las mujeres y hombres.
Desde el Barrio Primero de Cosolecaque, Doña Santa Hernández Hernández muestra que la tierra es tan bondadosa que proporciona absolutamente todo para curar el cuerpo.
“La madre tierra es lo mejor de la creación, de nuestro Dios Padre, él creó la tierra y creó todo”, dice la mujer de 68 años en un resplandeciente, verdoso y amplio patio con más de 200 variedades de plantas.
Se ha preparado para poder brindar sanación a los ciudadanos, terapias naturales conocidas como fitoterapia.
“El curar es algo maravilloso, un Don de Dios que nos dió para curar”, afirma quien a los siete años de edad aprendió el conocimiento de las plantas curativas y sus propiedades.
Fueron sus abuelos quienes mostraron cómo sanar diferentes dolencias o regular el organismo y con qué tipo de arbustos que nacen en los bosques, selvas o incluso en pantanos y manglares.
“El sanar mediante lo que nos produce la madre tierra, es un privilegio al cual todos tienen acceso, pero no todos recurren a él, el ser humano se ha beneficiado de los beneficios de las plantas desde tiempos inmemoriales”, recuerda.
Atiende de 4 a 5 clientes por día de diferentes edades y ello le obligan a tener suficientes arbustos, muchos difíciles de conseguir en la región como la calaguala, tlacopatle, guaco, ojo de cangrejo, entre otras.
“Dios nos manda para que seamos instrumentos, no es que seamos importantes nosotros como humanos, solo somos instrumentos de Dios”, insiste, con seriedad.
Se ha dado la tarea de sembrar la mayoría que ocupa para realizar sus remedios para empacho, algodoncillo, piquetes de víbora, capulincillo y tábano.
“Por una mordedura de serpientes se deben de curar en menos de 72 horas, puede llega a morirse la persona, si no hay alguien que tenga el conocimiento, deben de ir a un médico”, cuenta.
El sentir una conexión con la naturaleza y gratitud con la madre tierra -aclara- debe ser parte fundamental de la vida del ser humano, pero jamás se aparta de la ciencia y la medicina moderna.
“Con tantas enfermedades que existen deben acudir a un médico, es recomendable, lo primero es qué acudan a un médico, para eso estudiaron, pero si tiene fe y confianza recurrir a las plantas”, afirma Santa.