*Uno de los emblemas turísticos de San Pedro Cholula es justamente esa larga fila de arcos, 46 para ser exactos
Jaime Carrera
Puebla, Pue.- Debajo y a un costado de una añeja estructura arquitectónica que carga en sus columnas 448 años de historia se tejen historias, recuerdos y momentos: familias que degustan de comida típica poblana, gente transitando en bicicleta y niños brincando y jugando.
Uno de los emblemas turísticos de San Pedro Cholula es justamente esa larga fila de arcos, 46 para ser exactos, que han acompañado a la mítica ciudad y Pueblo Mágico durante casi cinco siglos y que pareciera que recién fueron construidos para el disfrute visual de los visitantes.
El portal Guerrero de esa demarcación data de 1573, lo que le permite tener el nombramiento del más extenso en su tipo en el país: 170 metros de largo de hilarantes arcos que invitan a los locales y foráneos a enmarcar su majestuosidad en todo tipo de fotografías.
Cada arco tiene poco más de tres metros de alto y en su conjunto son un ícono del municipio que lo hace destacar en México e incluso Latinoamérica, cada uno con un techo bóveda cuya función es proteger de las inclemencias del clima a los caminantes que transitan por Cholula.
Sus alrededores no pueden dejar de acaparar miradas: desde la inmediata Plaza de la Concordia con sus fuentes e iglesias aledañas, un exconvento y, por supuesto, la imponente pirámide de Cholula. San Pedro conjunta todo tipo de vestigios: prehispánicos y coloniales.
La monumental plaza es el centro neurálgico de la vida cholulteca y fue habilitada también en 1573, en su tierra se desarrollaban los días de tianguis y la vida comercial añeja de un municipio caracterizado por el peculiar trueque: intercambio de bienes sin dinero.
Allí mismo, en ese sitio, con una remodelación en 1646, en la Plaza de la Concordia yace una fuente de base octagonal en honor a San Miguel Arcángel, la cual fue donada por Felipe II de España casi un siglo antes de la fecha de su primera intervención, es decir, en 1554.
La Cholula prehispánica fungió como una importante metrópoli habitada durante miles de años, de hecho es uno de los asentamientos más antiguos que han estado habitados ininterrumpidamente, lo que le da un toque especial al recorrido por su plaza y portales.
En ese mismo espacio se encuentra una de los 13 monumentos más conocidos y dedicados al cura Miguel Hidalgo en México, el cual fue sustituido en 2015 por una estatua de cobre, la cual fue inaugurada en el marco de los festejos de la Independencia de aquel año.
Los colores de las paredes y estructuras históricas se combinan en el centro de Cholula, el corazón de una milenaria y cautivadora ciudad que se transforma día con día y en cuyos andadores, bancas y jardines, se disfruta de una nieve y la compañía de un amigo o familiar.
En Cholula, cada día es diferente, pero siempre, cada momento es acompañado por ese añejo portal de casi 500 años de historia, en una extensa plancha central que concentra abrazos, risas, encuentros y mucho orgullo de los que han habitado y viven en este Pueblo Mágico.
