*A sus 36 años, ‘El Martillo’ de Xalapa regresó de los Juegos Centroamericanos y del Caribe con una cosecha de dos oros y una plata; en pocos meses expondrá su Bicampeonato en los Juegos Panamericanos de Santiago de Chile.
Katy López Cedillo
Xalapa, Ver.- El referente nacional del triatlón se llama Crisanto Gralajes. El hombre nacido en Xalapa, regresó de su cuarta participación en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, en la edición de San Salvador 2023, con tres medallas: dos oros y una plata, que se suman a un racimo de 11 preseas totales (ocho oros y tres platas) obtenidas en todas sus participaciones en esta justa regional y que es además, el primer paso en el ciclo olímpico hacia Paris 2024.
A sus 36 años de edad, Grajales Valencia busca convertirse en el primer hombre de México que compita en cuatro ediciones consecutivas de Juegos Olímpicos, tras vivir sus primeros en Londres 2012 y cerrar en un sitio 28; representó a México también en la edición de Río 2016 y fue 12º y además de llegó a Tokio 2020 y se ubicó en la posición 31 en la prueba individual y 15º en el debutante evento del relevo mixto.
“No todo es color de rosa. Todo lo que hemos obtenido desde los lugares o a donde llegamos al ranking mundial ha sido a base de esfuerzo y mucho trabajo. Solo digo que es sacrificio dejar de ver a la familia, lo demás lo haces porque quieres: entrenas, cambias alimentación, dejas de ir a fiestas porque en verdad quieres hacerlo y es por tu mejoría”, comparte Crisanto, quien vivió el primer triatlón de su vida a los 8 años de edad.
“Al final son muchos años de estar en entrenamiento y competencias. Llevo profesionalmente 16 años, pero comencé en el triatlón siendo un niño y he ido subiendo cada vez, pero no deja de ser pesado y el cuerpo empieza a resentir”, confiesa.
Aunque duro, el camino de Crisanto se ha escrito entre esfuerzo, determinación y el brillo de resultados históricos: es el primer hombre de México que gana un oro individual en Juegos Panamericanos, en la edición de Toronto 2015 y cuatro años después defendió su cetro continental en los Juegos de Lima 2019; a finales de este año llegará a Santiago de Chile para exponer el título panamericano, motivo por el que es centro de atención y admiración de muchos, pero en especial de las nuevas generaciones.
“Me da mucho gusto que haya niños que sigan mi carrera. Yo de niño admiraba a Germán Silva y ahora tener la oportunidad de inspirar a niños es algo muy bonito, ojalá un día también compitan y logren sus sueños en el deporte”, consideró.
Cada logro del atleta xalapeño se ha entretejido por casi dos décadas, al lado de su entrenador, el ex triatleta Eugenio Chimal.
“Yo, desde los 20 años de edad, me puse la mentalidad de que esto lo hago por mí, porque me gusta, me apasiona y me mantiene vivo. Conforme tengo resultados tengo responsabilidades, pero si no gano una medalla olímpica no me voy a venir abajo, porque sé quién soy y lo que he logrado. He tenido la fortuna de rodearme de gente buena y positiva: mi padre y Eugenio que es un excelente entrenador y excelente amigo. Eugenio ha sido fundamental en mi vida y en mi carrera”.
Crisanto, de familia deportista, aprendió de su padre y de su madre a disfrutar de correr, pero para el triatlón no era suficiente. La prueba, comienza con una zambullida al mar para nadar 1,500m, al salir de la fase acuática, tomar la bicicleta para rodar por 40 kilómetros y después bajar del ‘caballo de hierro’ y correr 10 kilómetros más; en todo era bueno Crisanto, excepto bajo el agua y fue entonces que con mucha determinación y esfuerzo decidió fortalecer sus debilidades.
“La verdad sí tengo bastantes añitos en el triatlón. Para mi ya es un trabajo y me apasiona mucho hacerlo. Todo comenzó con mis padres que me inculcaron el correr, mi mamá lo hizo de una forma más recreativa y mi papá con más profesionalismo. De veras que desde que aprendí a caminar, mi papá me llevaba al Estadio Heriberto Jara, en Xalapa, para entrenar y hasta ahora allí lo sigo haciendo”, recordó.
Hoy está en la posición 85 del ranking de la Unión Internacional de Triatlón, aún presente y viendo desde primera línea el florecimiento del triatlón mexicano con tres hombres del país entre los 100 mejores del mundo, pues con él también se encuentra Irving Pérez, en la posición 51 y Aram Michel Peñaflor, en el lugar 66. Un camino en el que Crisanto ‘aró’ la tierra, sembró semilla y como deportista activo le toca ver cómo germina esta nueva generación que está lista para acompañarle y tomar la estafeta del orgullo mexicano en este deporte.
“Lucha con tus temores, sufre a tu manera. Intenta, no te detengas, disfruta la agonía, siente cómo el cuerpo quiere llegar al límite, pero te sorprende lo capaz y duro que eres, ve por más. Demuéstrate que pase lo que pase, lucharás y llegaras a casa contento, con una gran sonrisa y listo y dispuesto para repetir una y otra vez”.
Crisanto Grajales
Tres veces olímpico y Bicampeón Panamericano de Triatlón
