*Estar a bordo de la embarcación, con sus doce cañones, no solo es deleitarte del paisaje que ofrece la costa veracruzana, si no recordar el significado que el navío tuvo en la historia de México
Inés Tabal G.
Veracruz, Ver.- La réplica de una embarcación que hace dos siglos formó parte de la primera flotilla para liberar a México de los españoles, surca la costa del puerto de Veracruz con al menos 30 turistas abordo provenientes de distintos estados que desean conocer el Fuerte de San Juan de Ulua.
Hacia el horizonte, un punto café se distingue del azul celeste del mar, es la goleta “Iguala”, una embarcación de 22.9 metros de largo, 6.39 de ancho y 1.47 de altura.
En el interior, sus 12 cañones ornamentales, en apego a la apariencia de la original del siglo 19, ahora son utilizados por los tripulantes para tomarse la foto del recuerdo.
Estar a bordo no solo es deleitarte del paisaje si no recordar el significado que la nave tuvo en la historia de México. Fue adquirida en Estados Unidos por el imperio de Agustín de Iturbide para formar una primera flotilla naval, porque los barcos de guerra eran prácticamente inexistentes para la defensa del territorio independizado en 1821.
Los encargados de la negociación para adquirirla fueron el capitán de navío Eugenio Cortés Azúa y el teniente coronel Juan Davis Bradburn: junto con la “Iguala” se compró la “Anáhuac”, así como 10 balandras cañoneras: “Campechana”, “Chalco”, “Chapala”, “Orizaba”, “Texcoco”, “Zumpango”, “Papaloapan”, “Tampico”, “Tlaxcalteca” y “Tuxpan”.
Para el 17 de abril de 1822, las autoridades mexicanas informaron el arribo de la goleta “Iguala” al puerto de Alvarado, Veracruz. Con su docena de cañones, la embarcación fue pieza clave de los bloqueos comerciales y las estrategias de guerra que aislaron al contingente español de San Juan de Ulúa y llevaron finalmente a su capitulación.
Dos siglos después, en abril del 2023, volvió a recorrer el mar, aunque en una réplica para turistas quienes al final del recorrido se deleitan con la imponente estructura de San Juan de Ulúa y se adentran a este destino turístico, para después retornar al puerto de Veracruz.
Recubierta de madera es el principal atractivo de la ciudad que llama la atención de las personas que se forman en una fila para subir a bordo de este emblemático buque.
El navío histórico navega los martes, miércoles, viernes, sábado y domingo, de 9:30 a 15:30 horas, por un costo de 60 pesos por viaje de ida y vuelta. El principal punto de llegada es la Fortaleza de San Juan.
En un recorrido de aproximadamente media hora puedes deleitarte de las maravillas que ofrece el puerto, mientras la brisa del mar golpea tu rostro; aún costado el Faro Venustiano Carranza y la Torre Pemex, regalan un panorama de la arquitectura de esta ciudad costera. Al otro los barcos de carga que entran y salen del muelle con mercancía.
“Cada día hacemos entre 6 y 8 viajes. Los fines de semana puede ser más, aquí pueden entrar hasta 36 personas. Hay bancas donde te puedes sentar, pero también puedes estar parado durante el recorrido y caminar a lo largo del barco, hasta aquí en la popa puedes tomarte tu foto”, dice Armando, uno de los trabajadores.
